La evolución y las nuevas formas de inteligencia artificial que estamos viendo podrían reconfigurar el esquema de medios y por añadidura sus redacciones. Hoy, es muy probable que los bots de IA logren crear o recrear una historia basada en hechos. Tal como lo hacen los periodistas o los creadores de contenido. Incluso si analizamos veremos que hace 31 años que hay una IA que se viene desarrollando y que se lanzó hace unos días (Cyc) podemos inferir que el impacto en el desarrollo de la inteligencia artificial no solo es inexorable sino que al mismo tiempo no parece tener campo en el cual no pueda aplicarse ya que todo es cuestión de tiempo. Otro dato: El MIT (Massachusetts Institute of Technology) desarrolló una inteligencia artificial que edita las frases en los artículos de la Wikipedia. En este blog ya ha tratado temas similares (con la irrupción de ChatGPT) en: «Lo nuevo en la nueva realidad artificial» y «El periodismo y la inteligencia artificial«.
Ante cada nuevo avance de la tecnología, siempre brotan preguntas como ¿Seremos reemplazables por una simple tecnología que recopila información? ¿Se perderá el tacto humano a la hora de crear las historias? Nadie hoy tiene una respuesta definitiva. El tiempo y la evolución de la tecnología, su adopción por los ciudadanos y su relación con los medios de comunicación en específico, nos dejará mucha tela por cortar. Mientras, el exceso de información, de contenidos de todo tipo e incluso de medios, no facilita la tarea de los periodistas. Al contrario. Esta sobreabundancia y la disrupción tecnológica van dejando una enseñanza, los medios de comunicación necesitan reenfocar muchos de su contenido digital y no solo pensar en el posicionamiento de búsqueda.
Información e inteligencia artificial
Ya existe, de antemano, una dependencia a los buscadores inteligente tanto de los usuarios como muchas veces de los propios medios de comunicación. La información se recopila y se analiza en línea, lejos del lugar de los hechos y dando muchas veces por sentado que, por el solo hecho de estar publicado en la web, es verídico, en muchos casos sin chequearlo. Grave error y el mismo en el que podría caer la IA, al recopilar datos extraídos de fuentes que no pueden ser verificadas.
A estas alturas, el desarrollo tecnológico es indetenible y lo será o es lo mismo con la IA, una herramienta que pasó de ser un desarrollo sofisticado, experimental y especializado, a estar presente en la vida diaria de todos nosotros de múltiples formas, la más popularizada es el chatbot. Un cambio de paradigma que también se hace inevitable que impacte en un cambio profesional en muchas áreas y profesiones ,¿Por qué no lo haría en el periodismo en donde la herramienta pasa a tener un uso vital en la creación de las historias?
En este proceso se da también el apoyo de grandes empresas de periodismo a la IA. Knight Foundation anunció el año pasado la creación de un fondo de 3 millones de dólares para impulsar su uso. Si las empresas invierten en esta tecnología a futuro, ¿Podemos pensar en un reemplazo total de los periodistas en las redacciones? En el futuro cercano parece inviable. La mano humana es la que permite (en algunos casos) determinar la veracidad o no de los hechos a publicar. Una herramienta que la IA aún no tiene. Es la inteligencia emocional la que puede darle perspectiva a lo que ocurre detrás de los datos puros y duros. En síntesis la condición humana emerge como un complemento a la tecnología.