El desafío de cambiar sin perder el estilo. El diario La Prensa (Panamá) se ajusta a los tiempos que corren y combina cambio de formato con la adaptación de su diseño a una versión más limpia y simple. Practicidad y portabilidad a la orden del día.
El contexto histórico de la prensa escrita no es alentador. Crisis económica. En algunos países latinoamericanos, serios problemas con el suministro, elaboración y distribución del papel para prensa. Relativo avance de los medios digitales. Inversión publicitaria a la baja. Audiencias exigentes. Demasiados cambios para asimilar de golpe y en tan poco tiempo y ,de hacerlo, lleva años de asimilación como todo cambio cultural profundo. Pero los mercados son difrentes y cambian de un país a otro. La mayoría de los países de Latinoamérica se encuentran en un continuo y sostenido crecimiento económico, al menos hasta antes de la crisis financiera que sacude todo en estos días. Y en el informe de la WAN presentado en su último congreso de este año las cifras hablan por sí solas: las ventas de periódicos aumentaron el 2,57% en los países en vías de desarrollo.
Algunas cifras del 2007 al respecto: en Argentina la venta de periódicos creció 7,5% y en la India 11,7%. En los mercados más desarrollados las cifras son otras aunque el desarrollo de publicaciones en papel sigue teniendo sus adeptos. En Australia la venta de periódicos cayó 5,3%, en Estados Unidos descendió un poco más del 3%, en Reino Unido la venta también cayó el 3,46% y en La Unión Europea el descenso en las ventas fue en promedio del 2,37% el año pasado. En España las ventas de periódicos crecieron casi nada, un menos que tímido 0,29%.
¿Más Internet, menos prensa escrita y más crecimiento económico y alfabetización mayor venta de periódicos? Una conocida fórmula histórica que tal vez comienza a demostrarse como válida una vez más. Al menos en Panamá parece que la fórmula se confirma cuando las ventas de periódicos impresos de pago durante el 2007 tuvo un sostenido aumento de la mano del crecimiento económico más alto de Latinoamérica con el 11,2%.
“Los lectores tenían, y tienen después de este rediseño, una alta satisfacción con el producto actual. El cambio, por lo tanto, no implicaba una revolución sino, por el contrario, debía ser una evolución”
Evolución y sustancia. El diario La Prensa (Panamá) realizó en el año 2005 un rediseño total de su edición impresa. Al plantearse un nuevo escenario económico y al mismo tiempo evolucionar como producto, los objetivos planteados para esta segunda etapa del diseño fueron muy claros:
(1) Mantener como prioridad la calidad y el volumen informativo en las páginas
(2) Simplificar los niveles de edición y adaptar al nuevo formato las estructuras de la información
(3) Mejorar la navegación entre secciones y notas.
Todo esto basado en las investigaciones de mercado que indicaban una alta satisfacción de los lectores con el producto actual y que el cambio debía ser percibido como una evolución no como una revolución. Los lectores no estaban demandando un cambio total, por el contrario, retoques, ajustes y sobre todo que La Prensa siga siendo su periódico de todos los días.
Cabezales de sección. Se les incorporó un fondo del color utilizando el que ya los identificaba en la tipografía. Se simplificó el navegador horizontal.
Microformatos. Se les agregó color para que tenga mayor presencia gráfica.
Portada. Al tener el diario un ancho más estrecho, los navegadores verticales del anterior diseño se convirtieron en llamadas que pueden estar incluídos en varias posiciones en la portada.
Páginas internas. La edición de la fotografía y la nueva diagramación priorizan el impacto y la jerarquización periodística.
Simplificar e impactar. Para la adaptación del diseño al nuevo formato con la reducción de 1 pulgada (2,54 cm) en el ancho, se simplificaron los niveles de edición, se eliminaron los identificadores de notas que se transformaron en un antítitulo descriptivo y se incorporó una banda de color de fondo para identificar la nota prinicpal y marcar aún más la jerarquización periodística.
Se ampliaron las posibilidades de diagramación de los sumarios que de ser siempre a 1 columna ahora podían usarse a 1 o 2 columnas, se incorporaron líneas de 4 puntos en los cabezales de página para marcar mejor la navegación, se incorporó color en los despieces o valores agregados de las notas y cabezales de cuadernos.
Se modificaron los parámetros de diagramación pasando de una orientación vertical hacia una diagramación horizontal y con un despliegue fotográfico más grande e impactante. Con la arquitectura y organización de navegación en L que tenía la primera versión del diseño, el cambio de formato no fue traumático para la redacción ya que en las portadas de sección el área disponible para la información se asemejaba a la de un tabloide. Gracias a esto y al cambio en la orientación en la diagramación se pudo preservar las 6 columnas en la nueva versión.
Se usaron las mismas fuentes Knockout y Miller Text. En el caso de la primera tipografía, se redujo la cantidad de estilos usados a un máximo de 8. Estas fuentes le habían aportado a la primera versión del diseño solidez, funcionalidad y elegancia. Estos atributos se querían preservar.